Algunas de las preguntas que seguramente nunca hubieras pensado en preguntarte, y seguramente, preferirías no habértelas preguntado nunca
sábado, 29 de noviembre de 2014
¿Por qué cuando alguien está muy ansioso/a (véase alguien sentado frente a una aguja de un dentista o en el potro de un
ginecólogo) la gente dice cosas como “ponte
tranquilo/a”? ¿Creen que con decir a alguien “relájate” uno va a entrar en meditación zen y a gotearle la baba
por la comisura de los labios mientras pone la mente en blanco? ¿Piensan que no
nos damos cuenta que sería mejor estar un poco más tranquilo? ¿Piensan que somos así de despistados?
Si uno vuelve a nacer y
vuelve a hacer exactamente lo mismo, primero, es poco probable, y segundo, ¿dónde
está el misterio y la gracia? ¿No sería más inteligente hacer exactamente lo
contrario de la primera vez? Aunque sea solo por probar, total, vas a morir
nuevamente.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)